menu
keyboard_arrow_up

Recluse (Recluso)

Recluse
" 'Enga, aparta tus apestosas manos de mis tierras. Grr. ¡Asquerosos carroñeros te perseguirán de acá pa'llá! ¡Largo! No tengo mucho que perder y los demonios no van contra mi parentela. ¡Fuera te digo!"
  • Sus jinxes arrow_drop_down_circle
    Ogre

    Ogre (Ogro)

    Si el Recluso aparece como malo para el Ogro, el Ogro sabe que es malo.

Habilidad

«Podrías ser percibido tanto como malvado, como Esbirro o como Demonio, incluso estando muerto.»

El Recluso puede aparecer ante otras habilidades como un personaje malo, pero es bueno.

  • Cuando la alineación del Recluso se detecta, el Narrador elige si el Recluso aparece como bueno o como malo.
  • Cuando el Recluso está señalado por una habilidad que afecta específicamente a Esbirros o Demonios, el Narrador elige si el Recluso aparece como ese Esbirro o Demonio específico.
  • El Recluso puede aparecer como bueno, malo, Forastero, Esbirro o Demonio en diferentes partes de la misma noche. El Narrador elige lo que sea más interesante.
  • Un Recluso que aparece como un Esbirro o Demonio en particular no tiene la habilidad de ese personaje. Por ejemplo, un Recluso que aparece como Envenenador no se despierta por la noche y no puede envenenar a un jugador.

Narración

Cada vez que el Recluso es el foco de una habilidad que detecta o afecta a personajes malos, elige el personaje y alineamiento con el que aparecerá el Recluso. (Haz lo que sea apropiado, como mostrar una ficha de personaje malo, asentir, hacer señales con los dedos o permitir una habilidad que funcionaría normalmente sólo con malos, Esbirros o Demonios.)

Ejemplos

El Exterminador usa su habilidad con el Recluso. El Narrador decide que el Recluso aparezca como Diablillo, por lo que el Recluso muere. El Exterminador cree que acaba de matar al Diablillo.
El Empático, que tiene como vecinos al Recluso y al Monje, recibe que tiene a un malo como vecino. La noche siguiente, el Empático recibe que no tiene vecinos malos.
El Investigador recibe que el Recluso es o el Santo o la Mujer Escarlata.
El Recluso es ejecutado. El Enterrador recibe que el Diablillo fue ejecutado.
El Recluso tiene como vecinos al Diablillo y a un Viajero malo. Como mostrar un ‘2’ a un Chef podría ser muy revelador, el Chef recibe información cierta, un ‘0’, en su lugar.

Más información

El Recluso puede aparecer como Demonio o Esbirro en muchísimas ocasiones. Casi siempre que pienses que puede, puede. Otra cosa es que como Narrador debas hacerlo. El Recluso puede aparecer como Demonio para el Barbero y que elija el intercambio, o para el Encantador de Serpientes y que se cree un nuevo Demonio, o para Alsaahir y obligarle a elegir otro Demonio o Esbirro, o para la Rata de laboratorio y que reciba una habilidad, o para el Ingeniero y que se convierta en un Demonio o Esbirro, o para el Soplón y que reciba 3 faroles… Pero todo eso son ideas horribles para el juego, salvo que tengas un objetivo concreto. Recuerda siempre que narras para los jugadores, para que se lo pasen bien, y recuerda siempre, siempre que el Recluso es un Forastero y está para perjudicar a los buenos, pero tampoco tienen por qué perder la partida por un personaje que ni si quiera está tomando las decisiones.

Jinxes

 
 
Si el Recluso aparece como malo para el Ogro, el Ogro sabe que es malo.

Casos raros

 
 
Si el Caníbal gana la habilidad de Recluso, el Caníbal puede estar envenenado porque el Recluso aparece como malo o ganar la habilidad de Recluso y aparecer como malo para otras habilidades, pero no las dos a la vez.
 
 
Si aceptas que un Predicador eligiendo a un Recluso aparezca como Esbirro, el recluse sabría que ha sido elegido por el Predicador, perdería su habilidad y sería un Forastero, por lo que dejaría de estar afectado y volvería a tener su habilidad.
 
 
La Marioneta puede ser vecina del Recluso. El Demonio sabe igualmente quién es la Marioneta (y con ello sabrá que tiene un Recluso al lado). El Recluso podría saberlo también, pero es de esas decisiones que es mejor evitar como Narrador.
 
 
El Espía puede ver en el Grimorio al Recluso como un Esbirro o un Demonio, pero recuerda que el Recluso es un Forastero y su papel es perjudicar a los buenos.
 
 
La habilidad del Recluso afecta después de la configuración de la partida, por lo que no afecta al Señor de Typhon.
 
 
Si Ojo elige al Recluso, el Recluso puede aparecer como otro personaje y que la muerte la decida el Narrador.

Consejos

  • ¡Dile a todo el mundo que eres el Recluso cuanto antes! Así se tendrá en cuenta la mayoría de desinformación que produzcas en los jugadores buenos como un Chef, un Empático o un Investigador. Personajes que obtienen información más adelante como una Pitonisa o un Guardián de Cuervos sabrán que no deben escogerte. De todos modos, si el grupo sabe que eres el Recluso es posible que quieran ejecutarte igualmente.
  • Alternativamente, no reveles tu rol hasta el día final. Si puedes deducir qué otros jugadores son Forasteros o a qué jugadores les has aparecido erróneamente (con suerte a pocos), entonces puede que seas capaz de convencer al grupo de que eres, de hecho, un Forastero. Como el equipo de los buenos tiende a querer matar al Recluso, y eso no beneficia al equipo en sí, mantenerte vivo por todos los medios es una forma de ayudar a la victoria.
  • Recuerda que eres bueno y, por lo tanto, peor opción de ejecución que un jugador malo. Puedes ser percibido como malo incluso estando muerto, el Enterrador no conseguirá información fiable de tu muerte.
  • Normalmente serás percibido como malo, sospecha de quien diga otra cosa. Si estás sentado junto a un Empático que dice que sus 2 vecinos son buenos o una Pitonisa dice que no eres el Demonio, es muy probable que estén mintiendo y, seguramente, sean malos. Del mismo modo, aquellos que afirmen tener información que te señale como malo generalmente son confiables.
  • ¡Que no te dispare un Exterminador! El Exterminador normalmente te matará si te selecciona y esto hará creer que eras el Demonio y hay en juego una Mujer Escarlata. Esto no ayuda a tu equipo y deberías evitarlo a toda costa. Del mismo modo, evita ser ejecutado ya que un Enterrador normalmente recibirá que eras un Esbirro o un Demonio, confundiendo aún más al equipo bueno.
  • Ser percib ido como malo a veces puede ser útil. Los jugadores que digan que eres malo son confiables habitualmente, y la información de un Chef o de un Empático puede ser francamente útil para ayudarte a detectar a otros jugadores malos... Siempre y cuando convenzas al equipo de que el malo no eres tú.
  • Si el resto de jugadores sospechan mucho de ti y quieren ejecutarte, lo mejor es que aceptes tu suerte antes del día final. Puedes incluso votar por ti mismo para asegurarte ser ejecutado. Si el grupo cree que eres malo, morir antes del día final confirma que no eres el Demonio y desviará la atención de los buenos a la búsqueda de los malos reales. Morir el penúltimo día es seguro para ti, morir el último día significa tu derrota.

Hacerte pasar por Recluso

Cuando finjas ser el Recluso, hay unas cuantas cosas que debes tener en cuenta:

  • Nunca te deberías despertar, recibir nada ni actuar durante el día.
  • "No soy malo, pero soy percibido como tal" - Que el Recluso sea percibido como malo es una gran excusa para que tú lo hagas. Esto te puede ayudar a evitar la atención de personajes como el Empático, la Pitonisa o incluso el Investigador.
  • Ayuda al equipo bueno todo lo que puedas. Diles pronto que eres el Recluso y se proactivo en la búsqueda de otros Forasteros, asegurándote de que tu información no es confusa, etc. Si creen que eres bueno, les beneficiará mantenerte vivo, incluso aunque estés interfiriendo en sus habilidades.
  • Usa el Recluso como un farol secundario, o no digas mucho sobre tu rol durante un tiempo. Eventualmente revela que has estado ocultándote para confundir a los jugadores malos escondiendo los Forasteros, o que querías comprobar la información que daban los jugadores que dicen tener información, dado que debías aparecer como malo.
  • Como el Recluso sigue siendo percibido como malo incluso muerto, puedes mantener tu farol desde la tumba, incluso cuando personajes como el Enterrador o el Guardián de Cuervos tengan una lectura sobre ti. Insistir que hay aún un Esbirro o un Demonio vivo ayudará a tejer confusión en la plaza.
  • Saber que eres percibido como malo le dará al equipo bueno información sobre la que trabajar, ten en cuenta a personajes como el Chef, que querrá usarte como ancla para encontrar otros jugadores malos. Si estás sentado junto a tu Demonio, quizá quieras ver qué dicen el resto de jugadores antes de revelar tu farol.
  • Reclamar ser Forastero puede ayudar a ocultar la presencia de un Borracho y, quizás, dejar caer la posibilidad de la presencia de un Barón.